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para todos aquellos fanaticos de las historias de ficcion y los vampiros en este blog publicare los libros de la exitosa saga que a arrasado por EEUU cronicas vampiricas (de la serie vampires diarie)...


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lunes, 8 de marzo de 2010

EL RETORNO-- CRONICAS VAMPIRICAS-- CAPITULO 28

Matt no tenia idea de q hora era, pero estaba muy oscuro bajo los arboles. El
estaba acostado del aldo del auto de Elena como si hubiera sido lanzado y no lo
recordara, todo su cuerpo dolia.
Esta vez el se levanto y penso inmediatamente, Elena. Peor no podia ver en ningun
lugar el blanco de su camisola y cuando llamo, primero suavemente y despues
gritando, no tuvo respuesta.
Ahora el estaba sintiendo su camino en el claro, en manos y rodillas. Damon parecia
haberse ido y eso le dio una chispa de esperanza y coraje iluminando su mente. El
encontro la camiseta Pendlenton desecha—considerablemente pisoteada. Pero
cuando no pudo encontrar otro cuerpo suave y tibio en el claro, su corazon se
estrello en sus botas.
Y entonces el recordo el Jaguar, el busco freneticamente las llaves en el bolsillo q
estaba vacio y finalmente descubrio, inexplicablemente q estaban en el
encendedor.
El vivio a traves del agonizante momento en q el auto no encendia, y despues estaba
impactado de ver el brillo de los faros. El descifro brevemente como giraba el auto
mientras se aseguraba q no fuera a atropellar a Elena en el desmayada, entonces estaba cavando en en compartimiento guantera, lazando un manual, unas gafas
oscuras. Ah, y un anillo de lapislazuli, alguien lo mantenia alli de repuesto, por si
acaso. El se lo puso y le quedaba perfecto.
A lo ultimo sus dedos apagaron los faros y estaba libre para buscar en el claro
minuciosamente como queria.
No Elena.
No Ferrari.
Damon se la habia llevado a algun lado.
Esta bien, entonces los iba a rastrear. Para hacerlo debia dejar el auto de Elena
atras, el ya habia visto lo q esos mounstruos podian hacer a los autos, entonces
eso no decia mucho.
El tendria q ser cuidadoso con la linetena tambien. ¿Quien sabria cuanta bateria les
quedaba?
Por el infierno de eso, el intento llamar al moviñ de Bonnie y despues a su casa, y
entonces a la pension. No habia señal, aunque deacuerdo con el mismo movil, alli
debia haber. No necesitaba pregutar por q, tampoco—este era el Viejo Bosque, era
normal perder la señal. El ni siquiera se pregunto porq habia llamado primero al
numero de Bonnie, cuando Meredith probablemente seria mas sensata.
El encontro facilmente los rastros de Ferrari. Damon habia acelerado ahi como un
muciela...Matt sonrio acidamente asi como terminaba la frase en su mente.
Y entonces habia conducido para salir del Viejo Bosque. Esto era facil, estaba claro
q Damon habia ido tan rapido por control o porq Elena habia estado luchando porq
en un numero de lugares, principalmente en las esquinas, se veian las marcas de los
neumaticos en el suelo al lado de la carretera.
Matt estaba siendo cuidadoso con no pisar alguna pista, el podria retroceder en
cualquier punto. El tenia cuidado tambien de ignorar los ruidos a su alrededor. Ela
sabia q los malach estaban por ahi, pero se rehuso a pensar en ellos.
Y el nunca se pregunto porq estaba haciendo esto, deliberadamente dirigiendose al
peligro en vez de retirarse, en vez de sacar el Jaguar lejos del Viejo Bosque.
Despues de todo, Stefan no lo habia dejado como guardaespaldas.
Pero entonces no podias creer en nada de lo q Damon pudiera decir, penso.
Y ademas—bien, el siempre tenia un ojo en Elena, incluso antes de su primera cita
con ella. El podia ser torpe, lento y debil en comparacion con sus enemigos ahora,
pero siempre podia intentarlo.
Estaba de un tono oscuro ahora, los ultimos restos del crepusculo en el cielo y si
Matt miraba arriba podia ver las nubes y estrellas—con arboles inclinados de cada
lado.
El iba hacia el final de la carretera, la casa de los Dinstains apareceria pronto al
lado derecho. El les preguntaria si habian visto—
Sangre.
AL principio su mente volo en ridiculas alternativas, como pintura roja oscura. Pero
su linterna habia captado manchas de un rojo llegando a cafe al lado de la
carretera justo donde habia una curva cerrada. Esa era sangre en la carretera, y
no solo un poco de sangre.
Cuidadoso de caminar bien a los lados de las manchas, corriendo su linterna una y
otra vez al lado de la carretera, Matt intento descifrar lo q habia pasado.
Elena habia saltado.
Tampoco era q Damon la haya empujado del auto en movimiento—despues de todo
el problema q habia tenido en atraparla, no tenia mucho sentido. Claro, el debio
haber bebido de ella hasta quedar satisfecho—los dedos de Matt subio
instintivamente a su cuello—¿Pero entonces, por q llevarla en el auto?.
¿Para matarla empujandola del auto?
Una forma estupida de hacerlo, pero tal vez Damon habia estado contando en sus
pequeñas mascotas a cuidar del cuerpo.
Posiblemente, pero no muy probable.
¿Q era probable?
Bien, la casa de los Dunstains estaba subiendo de ese lado de la carretera, pero no lo podia ver desde ahi. Y podia ser justo q Elena habia saltado fuera del auto en
movimiento mientras daba la curva cerrada. Eso habria tomado cerebro y agallas y
una impresionante confianza en la suerte q eso no la iba a matar.
la linterna de Matt lentamente ilumino la devastacion en los setos y los arbustos en
el camino.
Dios mio, eso fue lo q hizo. Si, ella habia saltado e intentado girar. Jeez, ella tenia
suerte de no haberse roto el cuello. Pero ella siguio rodando agarrando las
enredaderas y raices para frenarse, por eso todo estaba rasgado.
Una burbuja de euforia estaba rozando a Matt, el lo estaba haciendo, estaba
rastreando a Elena. El podia ver la caida claramente como si pudiera estar alli.
Pero entonces ella se habia volcado por la raiz del arbol, el penso mientras seguia
siguiendo el camino. Eso debio lastimarla, y ella se estampo abajo y rodo por el
concreto un poco—eso debio hacerla agonizar, habia dejado mucha sangre y
despues entro en los arbustos.
¿Y entonces q? el rodondendro no mostraba mas signos de la caida. ¿Q habia
pasado alli? ¿Habia Damon dado reversa al Ferrari para regresarla?
No, Matt decidio examinando la tierra detenidamente. Solo habia un juego de
huellas y eran las de Elena. Elena se habia levantado aqui—solo para caerse otra
vez probablmente por las heridas. Despues ella se habia vuelto a levantar, pero las
huellas era raras, una huella normal en un lado y una profunda pero pequeña
sangrada al otro lado.
Una muleta, ella encontro una muleta. Si, y esa marca arrastrada era de su pie
herido. Ella camino arriba por ese arbol, y entonces a su alrededor—o salto, de
hecho, asi era como se veia, y despues fue hacia donde los Dunstains.
Chica inteligente, ella probablemente debia estar irreconocible ahora, ¿Y ademas a
quien le importaba si ellos se enteraban de la semejanza entre ella y la ultima, gran
Elena Gilbert? Ella podia ser la prima de Elena de Filadelfia.
Entonces ella se fue, uno, dos, tres...ocho pasos—y alli estaba la casa de los
Dunstains. Matt pudo ver luces, Matt pudo oler caballos. Excitadamente, el corrio
el resto del camino—teniendo un par de caidas q no le hizo ningun bien a su cuerpo
adolorido, pero seguia derecho al porche de atras iluminado. Los Dunstains no eran
gente del porche de adelante.
Cuando el consiguio la puerta, el golpeo casi freneticamente. El la habia
encontrado. ¡Habia encontrado a Elena!.
Parecio pasar mucho tiempo antes q la puerta abriera un poco. Matt
automaticamente calzo la puerta para q no cerrara mientras pensaba. Si, bien,
ustedes son personas precavidas. No del tipo a dejar a un vampiro ver a una chica
cubierta de sangre.
“¿Si? ¿Q necesita?”
“Soy yo, Matt Honeycutt” el le dijo al ojo q se asomaba por la puerta entreabierta
“Vine por El—por la chica”
“¿De q chica estas hablando?” dijo la voz bruscamente.
“Mire, no hay de q preocuparse, soy yo—Jake me conoce de la escuela, y Kristin me
conoce tambien. Vine a ayudar”
Algo en la sinceridad de su voz parecio encender un acorde de la persona tras la
puerta. Esta se abrio para revelar un señor grande de cabello negro q tenia una
camisa debajo y necesitaba afeitarse. Tras de el la sala habia una mujer alta y
delgada q se veia como si hubiera estado llorando. Tras ellos estaba Jake quien
habia estado en una curso mayor q Matt en el Robert E. Lee High.
“Jake” dijo Matt, pero no tuvo respuesta excepto una mirada de angustia.
“¿Q va mal?” Matt demando horrorizado “Una chica vino hace poco—ella estaba
lastimada—pero—pero—¿La dejaron entrar, verdad?”
“Ninguna chica vino” dijo el señor Dunstain rotundamente.
“Ella debio, yo segui su rastro—ella dejo un rastro de sangre, entienden, casi en su
puerta” Matt no se estaba permitiendo pensar. De algun modo, si decia contando
los hechos asi de alto, ellos iban a sacar a Elena.
“Mas problemas” dijo Jake, pero en una voz sosa q iba con su expresion.
La señora Dunstain parecia mas simpatica “Escuchamos una voz afuera en la noche,
pero cuando miramos no habia nadie alli, y tenemos nuestros propios problemas”
Fue entonces cuando, a la derecha de la entrada, Kristin irrumpio en la habitacion.
Matt la miro sintiendo un déjà vu. Ella estaba vistiendo algo como Tami Brice, ella
habia cortado el inferior de sus jeans hasta q casi parecian no existir, y arriba
tenia el top de un bikini, pero con—Matt alejo la vista—dos grandes hoyos cortados
justo donde Tami se habia pegado los pedazos de carton. Y ella se habia decoradon
con pegamento destellante.
Dios, ella solo tiene ¿Q, doce? ¿Trece? ¿Como era posible q actuara asi?
Pero en el siguiente momento, todo su cuerpo estaba vibrando en shock. Kristin se
habia pegado en el y estaba hablando tiernamente “¡Matt Honey-trasero! ¡Viniste a
verme!”
Matt respiro cuidadosamente para acabar su shock. Matt Honey-trasero, ella no
podia saber eso, ella ni siquiera iba a la misma escuela de Tami. ¿Por q Tami la
llamaria y—le diria algo como ella?
El sacudio su cabeza como si pudiera aclararla. despues el miro a la señora Dunstain
quien parecia agradable “¿Puedo usar su telefono?” el pregunto “Necesito—en
verdad necesito hacer un par de llamadas”
“El telefono ha estado muerto desde ayer” el señor Dunstain dijo con dureza, el no
intento mover a Kristin lejos de Matt, quien estaba extrañado porq estava enojado
“Probablemente un arbol caido y sabe q por aqui no funcionan los moviles”.
“Pero—” la mente de Matt giro en superdirecta “¿Realmente quieren decir q no ha
venido ninguna chica joven pidiendo ayuda? ¿Una chica rubia con ojos azules?. Lo
juro, yo no fui quien la lastimo. Lo juro, quiero ayudarla”
“¿Matt Honey-trasero? Estoy haciendo un tatuaje solo para ti” aun presionando
tras el, Kristin extendio su brazo izquierdo. Matt lo miro horrorizado. Ella habia
usado obviamente agujas o pichazos en antebrazo y despues abrio un cartucho de
tinta azul para estilografos para suministrarlo. Era ese tipo de tatuaje de prision,
hecho por un niño. Las letras diseminadas M A T ya eran visibles, a lo largo de un
emborronado de tinta donde probablemente iba a haber otra T.
No me sorprenderia q ellos no estuvieran emocionados con dejarme entrar, Matt
penso mareado. Ahora Kristin tenia ambos brazos rodeando su cintura haciendole
dificil respirar. Ella estaba en puntas hablandole, susurrandole rapidamente
algunas cosas obscenas como las q Tami habia dicho.
El se dirigio a la señora Dunstain “Honestamente no he visto a Kristin por—debe
ser cerca a un año. Tuvimos el fin del carnaval del año y Kristin ayudo con la vuelta
en poni, pero...”
La señora Dunstain estaba asintiendo levemente “No es tu culpa, ha estado
actuando de ese modo con Jake, su propio hermano, y con—con su papa. Pero te
estamos diciendo la verdad, no hemos visto otra chica. nadie mas aparte de ti ha
tocado a la puerta hoy”
“Esta bien” los ojos de Matt estaban aguados. Su cerebro primero pedia
supervivencia, le estaba diciendo salvar su respiracion, no discutir, diciendole q
dijera “Kristin—no puedo respirar—”
“Pero te amo, Matt Honey-trasero, no quiero q me abandones nunca. Especialmente
por esa vieja zorra, esa vieja zorra con gusanos en las cuencas de sus ojos”
Otra vez Matt sintio el mundo meciendose pero no pudo soltar un grito ahogado, el
no tenia el aire. Con los ojos pequeño el volteo impotente hacia el señor Dunstain q
era quien estaba mas cerca.
“No puedo—respirar—”
¿Como podia una niña de trece años ser tan fuerte? hizo q ambos, el señor
Dunstain y Jake tuvieran q ayudar a alejarla. No, incluso eso no estaba
funcionando. el estaba empezando a ver una red gris pulsando ante sus ojos, el
necesitaba aire.
Hubo un golpe bastante alto q termino con un ruido de piel y despues otro.
Depronto el pudo respirar otra vez.
“¡No, Jacob! ¡No mas!” la señora Dunstain lloro “¡Ya lo solto—no la golpees mas!”
Cuando la vision de Matt se aclaro el señor Dunstain estaba abrochandose el
cinturon. Kristin estaba gimiendo “¡Ya ve.raann! ¡Ya ve-raaan! ¡Lo van a lamentar!”
despues se fue rapido del cuarto.
“No se si esto va a ayudar o lo va a empeorar” dijo Matt cuando recupero en aliento
“pero Kristin no es la unica chica actuando asi. Hay al menos otra en la ciudad—”
“Todo lo q me preocupa es Kristin” dijo la señora Dunstain “Y eso...no es ella”
Matt asintio, pero habia algo q necesitaba hacer, encontrar a Elena.
“¿Si alguna chica rubia viene pidiendo ayuda, pueden dejarla entrar?” le pregunto a
la señora Dunstain “¿Por favor? pero no dejen a ningun tipo—incluso a mi si no
quieren”.
Por un momento sus ojos y los de la señora Dunstain se encontraron y el sintio una
coneccion. Entonces ella asintio y se apresuro en sacarlo de la casa.
Esta bien, Matt penso. Elena habia estado por aqui, pero ella no habia estado
exactamente aqui. Entonces mira los signos.
El miro, y lo q los signos mostrabn era eso, sin unos pasos en la propiedad de los
Dunstains, ella inexplicablemente habia dado una vuelta a la derecha, adentrandose
en el bosque.
¿Por q? ¿Algo la habia asustado? ¿O ella habia—Matt sintio q se revolvio su
estomago—de algun modo sido engañada cojeando una y otra vez hasta q al final
habia dejado la ayuda humana atras?
Todo lo q el pudo hacer fue seguirla entre el bosque.

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